Ayer, 14 de marzo se celebró el Día Nacional contra las Agresiones a los Sanitarios. Un problema “in crescendo” que sitúa a la Comunidad de Madrid durante 2018 en el tercer puesto en cuanto al número de denuncias de agresiones a sanitarios y en los tres meses del 2019 en el segundo puesto, detrás de la Comunidad de Andalucía.
EMESA PREVENCIÓN, como Servicio de Prevención Ajeno, sensible a estos datos quiere prevenir este tipo de conductas delictivas y para ello cuenta entre sus actividades preventivas con la posibilidad de elaborar un Plan de Prevención de Violencia Laboral en nuestras empresas clientes del sector sanitario que nos lo soliciten.

Dicho Plan se anexaría al Plan de Prevención de Riesgos Laborales, debiendo comenzar con una inequívoca declaración y compromiso del Empresario.
También para prevenir esta lacra, debe contar el Plan con la colaboración de todos los trabajadores de la Empresa.

Dicho Plan debe contemplar todos los factores que se deriven del estudio de cuestionarios anónimos elaborados sobre el modo de desarrollar las tareas, datos de absentismo de la empresa, rotaciones, reclamaciones, etc., en general factores personales del trabajador y su puesto de trabajo.
Observar y valorar los factores del entorno y los factores derivados de la organización de las tareas, para aplicar modificaciones en las medidas preventivas y de organización de los trabajos.

Por último y si fallase en parte las modificaciones preventivas, EMESA PREVENCIÓN está en condiciones de ofrecer todo el apoyo posible al trabajador afectado y asesorar jurídicamente cualquier tipo de consulta y acompañamiento legal en la interposición de la correspondiente demanda, si fuera necesario.