PREVENIR, DETENER Y REVERTIR LA DEGRADACIÓN DE LOS ECOSISTEMAS EN TODO EL MUNDO.
El Día Mundial del Medio Ambiente 2021, organizado por Pakistán el próximo 5 de junio, marcará el inicio del Decenio de las Naciones Unidas sobre la Restauración de los Ecosistemas que sustentan todas las formas de vida de la Tierra. EMESA Prevención quiere unirse a esta alerta para revertir la degradación de los ecosistemas en los lugares de trabajo de las ciudades.
El Decenio de las Naciones Unidas 2021-2030 sobre la Restauración de los Ecosistemas liderado por el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PUMA), la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) y sus aliados, abarca los ecosistemas terrestres, costeros y marinos, tiene por objetivo prevenir, detener y revertir la degradación de los ecosistemas en todos los continentes y océanos para ayudar a erradicar la pobreza, combatir el cambio climático y prevenir una extinción masiva de la Humanidad. El éxito depende de la colaboración de todos, cada uno en sus respectivos campos de actuación.
Los expertos advierten que los ecosistemas de todo el mundo se están colapsando. El planeta está perdiendo 4,7 millones de hectáreas de bosques cada año, un área más grande que Dinamarca, y durante el siglo pasado, la mitad de los humedales del mundo se secaron, los glaciares están derritiéndose a un ritmo muy avanzado.
Los ecosistemas, son el nexo de unión entre todos los seres vivos y el entorno que ocupan, es un equilibrio para que las cosas funcionen y proliferen de forma natural.
La OMS ha realizado un cuestionario que respondieron más de 2.000 personas de más de 140 países que transcribimos a continuación con el objeto de dar publicidad a sus conclusiones y alertar la conciencia medioambiental en nuestro entorno.
Conclusiones del Cuestionario que ha realizado la OMS.
- La restauración de los ecosistemas es una misión mundial
Si bien la representación fue prácticamente uniforme en todos los países, algunos lugares registraron una participación superior a la media, entre ellos Kenia, Nigeria, México, Brasil, el Reino Unido, Estados Unidos y la India.
Sin embargo, la visión de la restauración de los ecosistemas cautiva a las personas independientemente de su origen: 99% dijo que le gustaría tomar medidas en apoyo del Decenio de las Naciones Unidas.
- Los jóvenes están interesados en la restauración de la degradación de los ecosistemas
Quizá la lección más sorprendente hasta ahora fue cuántos jóvenes son los interesados. Si bien la restauración de los ecosistemas ha aparecido en revistas científicas y proyectos ambientales durante casi 40 años, más de la mitad de quienes respondieron el cuestionario (57%) eran menores de 34 años.
Se espera que los jóvenes desempeñen un papel vital en los proyectos de restauración, como la plantación de árboles, en el marco del Decenio de las Naciones Unidas.
Los jóvenes ya han contribuido a la estrategia del Decenio de las Naciones Unidas mediante consultas en más de 20 países, organizadas por el Grupo Principal de infancia y juventud del PNUMA.
- La restauración es profundamente personal
Un asombroso 68% de los encuestados dijo que su interés en la restauración es principalmente personal. Solo 32% se ocupa de la restauración de los ecosistemas como parte de su vida profesional.
Esto representa un fuerte llamado al Decenio de las Naciones Unidas y sus organizaciones asociadas para que la información sobre la restauración de los ecosistemas sea accesible al público, atractiva y de fácil comprensión para aquellos que no han estudiado el tema, pero sí están dispuestos a dedicar su tiempo libre a revivir nuestro dañado planeta.
- A quienes trabajan en la restauración a menudo les hacen falta fondos suficientes y estar conectados.
Un tercio de los involucrados en proyectos de restauración sobre el terreno dicen que la falta de financiación es su mayor obstáculo, seguido de una escasez de capacidad técnica (19%) y de apoyo político (15%).
Más de 40% de los implementadores de la restauración aún no están conectados directamente con las grandes organizaciones mundiales que apoyan la restauración de los ecosistemas, lo que resalta la necesidad de que el Decenio de las Naciones Unidas se conecte con este eslabón faltante.
La variedad de ecosistemas en los que se está trabajando es tan amplia como el alcance del Decenio de las Naciones Unidas, desde los desiertos de la Península Arábiga hasta las tierras de cultivo en África oriental y los bosques de niebla de los Andes. Si bien los bosques (30%), las áreas urbanas y las tierras de cultivo (15% cada una) ocupan un lugar destacado, todos los ecosistemas cubiertos por la estrategia del Decenio de las Naciones Unidas fueron mencionados.
Se ha lanzado una nueva encuesta de mayor profundidad para evaluar mejor las necesidades quienes ya están trabajando en la restauración.
Ecosistemas en los que se está trabajando
- La acción personal para la restauración adopta muchas formas y se prevé que aumente con el tiempo
Cuando se les preguntó qué acciones de restauración es más probable que emprendan durante los próximos 30 días, el 30% de los encuestados dijo que le gustaría unirse a una iniciativa de restauración en su entorno inmediato.
Adoptar patrones de consumo más sostenibles, por ejemplo, mediante dietas sostenibles, ocupa el segundo lugar entre las acciones a corto plazo seleccionadas por los participantes del cuestionario. Abogar por la restauración quedó en tercer lugar. La mayoría eligió la financiación colectiva o la donación para la restauración como la acción menos probable. Solo 0,7% dijo que no tomaría ninguna medida para la restauración.
Al considerar un horizonte a más largo plazo, los próximos 365 días, el compromiso proyectado parece profundizarse. El porcentaje de personas que afirman que probablemente comenzarán su propia iniciativa de restauración aumenta de 26% a 34%.
Esto subraya que, idealmente, el Decenio de las Naciones Unidas sobre la Restauración de los Ecosistemas debería guiar a los partidarios mediante una variedad de oportunidades de participación, desde simplemente aprender sobre la restauración hasta liderar proyectos.
Las zonas urbanas donde vivimos y trabajamos.
Las zonas urbanas ocupan menos del 1% de la superficie terrestre del planeta, pero es ahí donde reside más de la mitad de la población mundial. Las ciudades son ecosistemas cuyo estado tiene una repercusión enorme en nuestra calidad de vida. Los ecosistemas urbanos funcionales ayudan a limpiar el aire que respiramos y el agua que consumimos, contrarrestan el efecto de isla térmica y contribuyen a nuestro bienestar al protegernos de las amenazas y darnos oportunidades de descanso y ocio.
Los ecosistemas urbanos simbolizan una transformación radical de las zonas naturales a las que han sustituido, que suelen presentar un alto grado de degradación. Una planificación deficiente sella los suelos, lo que deja poco espacio para la vegetación entre las viviendas, carreteras y fábricas. Los desechos y las emisiones derivadas de la industria, el tráfico y los hogares generan contaminación del suelo, hídrica y atmosférica. El crecimiento urbano incontrolado engulle cada vez más hábitats naturales y tierras agrícolas fértiles.
Para restaurar los ecosistemas urbanos, es necesario que los ciudadanos y los encargados de la adopción de decisiones se conciencien y comprometan.
- Los espacios verdes deben gozar de un papel preponderante en la planificación urbana.
- Los grupos cívicos y las autoridades municipales pueden limpiar los cursos de agua, plantar árboles y crear zonas arboladas urbanas y otros hábitats para especies silvestres en parques, escuelas y otros espacios públicos.
- Las aceras permeables y los humedales urbanos pueden proteger frente a las inundaciones y la contaminación.
- Las zonas industriales contaminadas pueden rehabilitarse y convertirse en reservas naturales urbanas y lugares para la recreación y relajación.
- Todas las empresas en general deben poner los medios para no contaminar efectuando una buena gestión de sus residuos.