LA SEQUIA ES UN BOTÓN DE ALARMA

El 5 de junio de 2023 se conmemora desde 1974, el Día Mundial del Medio Ambiente, con el objeto de concienciar que debemos cuidar el planeta donde vivimos, y es la fecha más relevante en el calendario de la Organización de Naciones Unidas para fomentar la conciencia y la acción ambiental a nivel global.

Estos dos últimos años se han presentado con una primavera más cálida, menores lluvias, la de 2022 la describe un informe de AEMT como peor que la primavera 2022 (periodo comprendido entre el 1 de marzo y el 31 de mayo de 2022) que fue la duodécima primavera más cálida desde el comienzo de la serie en 1961 y la novena más cálida del siglo XXI.

Este 2023, el invierno ha sido cálido y húmedo a costa, sobre todo del mes de diciembre, aunque todas las cuencas excepto las de Tajo, Júcar y Segura, están en situación de sequía meteorológica que dura ya más de un año.

La estación que casi dejamos atrás ha contado con una anomalía de 8 décimas por encima de lo normal. Es el décimo invierno más cálido de la serie histórica, desde 1961, y quinto más cálido del siglo XXI. Podemos decir que llueve un 36% menos de lo normal.

Las cifras nos indican una sequia progresiva y ello nos hace reflexionar:

  1. La mayor parte del agua se consume, con creces, a través de la agricultura, pues supone el 69 % de las extracciones de agua anuales a nivel mundial.
  2. Menos del 3% del agua del planeta es potable, y de él un 2,5 % está congelada y se encuentra en la Antártida, el Ártico y en glaciares.
  3. Un uso inteligente y programado del agua nos ayudaría a asegurar el flujo constante de agua limpia y segura.
  4. Puedes ahorrar agua duchándote más rápido, cerrando el grifo mientras te cepillas los dientes, instalando un inodoro de bajo flujo y de muchas otras formas.
  5. Una persona promedio, con una ducha de unos 10 minutos al día, consume el equivalente a más de 100.000 vasos de agua potable cada año.
  6. La escasez de agua grave afecta a aproximadamente 4000 millones de personas, o lo que es lo mismo, a casi dos tercios de la población mundial, al menos un mes al año.

Una solución para combatir la escasez de agua, en las etapas de poca pluviosidad es reducir el consumo de agua, sin despilfarro y de una forma sostenible para cada lugar.

Otra, además de proporcionar un suministro de agua controlado a nivel local de manera confiable, consiste en el reciclaje del agua, proporcionando una segunda vida al agua utilizada.

 

escasez de agua

 

Al proporcionar una fuente adicional de agua el reciclaje de esta puede ayudarnos a encontrar diferentes maneras de disminuir el desvío de agua de los ecosistemas sensibles. Otros beneficios incluyen la reducción de desechos de aguas residuales y la reducción y prevención de la contaminación.

El agua reciclada también se puede utilizar para crear o mejorar los humedales y los hábitats ribereños.

El reciclaje del agua puede reducir la contaminación y prevenirla. Se puede reutilizar entre otros para:

  • El riego agrícola y de jardinería.
  • Los riegos de las calles en las ciudades.
  • Fuentes ornamentales, parques públicos, lagos artificiales, riegos de campos de futbol y de golf, etc.
  • Los procesos industriales, como la fabricación de papel, tintes, etc.
  • Actividades de la construcción.
  • Descargas de inodoros.
  • La reposición de una cuenca de agua subterránea para inyectar en acuíferos, y evitar el ingreso de agua salada en las zonas costeras.
  • Agua de refrigeración de centrales eléctricas y refinerías.

 

bosque

 

No despilfarremos el agua y protejamos nuestro entorno