Siguiendo los consejos que ha establecido la Organización Mundial de la Salud, en la 9ª Conferencia de Promoción de la Salud, con la meta de Promover la salud capacitando y formando a las personas, las comunidades y las sociedades, entre cuyo tejido productivo se encuentran las empresas hay que dotarlas de medios para que se ocupen de la salud y la calidad de vida de sus trabajadores.
La promoción de la salud forma parte de los objetivos de la Agenda 2030 para el desarrollo sostenible y por ello la OMS se fija los objetivos siguientes:
Objetivos
- Orientar a los Estados Miembros sobre cómo incorporar la promoción de la salud en las respuestas nacionales a los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y acelerar los progresos hacia las metas de los ODS.
- Intercambiar experiencias nacionales para:
- reforzar la buena gobernanza en pro de la salud a través de la actuación intersectorial;
- ampliar y fortalecer la movilización social; y
- fomentar los conocimientos sobre salud.
3. Poner de relieve la función cambiante del sector de la salud como principal adalid de la promoción de la salud.
4. Poner de relieve la función que desempeñan las ciudades –y los dirigentes municipales, en particular los alcaldes– en la promoción de la salud (con la creación de la iniciativa «Ciudades Saludables»), en el contexto de una población mundial cada vez más urbanizada
Por ello EMESA Prevención quiere colaborar difundiendo este decálogo y en especial entre los trabajadores de las empresas clientes para fomentar una vida saludable actuando sobre las tres esferas: física, mental y sociolaboral.
Decálogo

Evita el Sedentarismo. Es suficiente andar todos los días un mínimo de treinta minutos. Practicar ejercicio acorde con la edad.
Evita la obesidad. Solo se logra de forma eficaz, influyendo en la balanza “gasto/aporte” de calorías. Si aportamos menos calorías de las que gastamos adelgazamos.


Ingiere dieta variada. Predominantemente fruta, verdura, lácteos semidesnatados, clara de huevo, pescados…. limita las carnes, grasas saturadas y trans, azucares y harinas refinadas.
En general adquiere hábitos cotidianos saludables. Erradica hábitos tóxicos: tabaco, alcohol y otras sustancias de abuso.


Realiza chequeos sanitarios aconsejados según sexo y edad y como mínimo los exámenes de salud laborales.
Socializa, cultiva amistades de forma directa, los contactos virtuales mail, wasap, redes sociales e incluso telefónicos son para grandes distancias.


Busca el equilibrio mental mediante técnicas de relajación que modulen y controlen estrés y ansiedad.
Dispón y organiza tu ocio. Prepara un calendario para realizar todo aquello que siempre has querido hacer y que se sale de la rutina diaria.


Utiliza bien las posibilidades que te ofrecen las nuevas tecnologías, sin caer en su dependencia. Rebaja horas de ordenador y móvil.
Sigue las normas preventivas de Seguridad y Salud, al realizar las tareas de tu puesto de trabajo, evitando riesgos inútiles especialmente los que impliquen a terceros.
