“Melanomas, cataratas, inmunosupresión, son los principales efectos de la radiación ultravioleta.”
La capa de Ozono es como la piel de la tierra y nos protege de los rayos solares, sobre todo de la radiación ultravioleta de más corta longitud de onda, es decir los ultravioletas tipo C de entre 200 y 280 nm, aunque el tipo B de entre 280 y 320 nm también hay que evitar. Cuanto mas corta es la longitud de onda mayor es la energía.
La capa de Ozono absorbe entre el 97 y el 99 % de la radiación solar

La Zoonosfera que tiene el 90% de Ozono y nos arropa entre 15 y 40 kilómetros de altura es la que defiende la vida del planeta, la vida humana, la conservación de otras muchas especies y puede afectar a muchos cultivos agrícolas un exceso de radiación ultravioleta.
En los últimos años se ha hecho un esfuerzo conjunto de muchos países que ha permitido reducir el uso de sustancias que deterioran la capa de ozono. Ello ha supuesto una pequeña recuperación, eliminando la comercialización y el uso de gases de efecto invernadero como los refrigerantes, sprays, etc.
Los últimos datos del 2018 validan una recuperación entre el 1 al 3% en una década, esperando una recuperación notable en el hemisferio norte para el año 2030.
¿Cómo afecta al ser humano?
Principalmente se afecta la piel de una forma cancerígena, apareciendo melanomas. La aparición de cataratas y una supresión del sistema inmunitario lo que repercute en una mayor receptividad de enfermedades infecciosas y en una menor eficacia de las vacunas.
Las lesiones oculares van desde una queratitis, sensación de arenilla en los ojos, aparición de una membrana -pterigión- conjuntival, desarrollo de cataratas y una degeneración macular por radiación -quemadura- de los fotorreceptores de la retina.
Las lesiones de la piel comienzan con un eritema actínico con escozor, hipersensibilidad y dolor, envejecimiento de la piel por quemadura de las fibras de colágeno y por ultimo aparición de lesiones cancerosas tipo melanoma.

Afecta también a ciertos cultivos agrícolas sensibles a la radiación ultravioleta, lo que repercute negativamente en las cosechas y por tanto en la alimentación humana y de los animales.
Medidas preventivas
Como Servicio Ajeno de Prevención de Riesgos Laborales, EMESA Prevención, aconseja a los trabajadores que desarrollan sus tareas expuestos a la luz solar y a sus radiaciones las siguientes recomendaciones:
Sobre la piel:
- Utilizar camisas de manga larga y pantalón largo.
- Cremas y pomadas de protección como un elemento de protección de la piel.
- Reaplicar tantas veces como haga falta.
Sobre los ojos:
- Para la protección de los ojos de la radiación solar, los protectores oculares deberán incorporar filtros homologados.
