El Día Mundial contra la Hepatitis se celebra el 28 de Julio de 2023. Esta fecha corresponde a la del nacimiento del doctor Baruch Samuel Blumberg, descubridor del virus de la Hepatitis B. EMESA Prevención, pretende crear conciencia entre sus empresas clientes acerca de la hepatitis en general y de la hepatitis A en especial.
Aproximadamente una de cada doce personas en el mundo vive con hepatitis A, B o hepatitis C. Si no se trata, la hepatitis pueden derivar a una degeneración hepática, con la consiguiente insuficiencia hepática, o al cáncer. Su etiología puede ser infecciosa, inmunitaria o tóxica y en nuestro entorno distinguimos también la alcohólica.
Entre las causas infecciosas por virus existen muchos tipos: virus A, virus B, C, D, E, F, G. Los más importantes son los virus A, B, C y, en menor medida, el D y el E, siendo los últimos, F y G los últimos descritos y los menos estudiados.
¿Cuáles son los síntomas de la hepatitis?
Algunas personas con hepatitis no presentan síntomas y no saben que están infectadas. Si aparecen síntomas, pueden incluir:
- Fiebre
- Fatiga
- Pérdida de apetito
- Náusea y/o vómitos
- Dolor abdominal
- Orina oscura
- Heces de color arcilla
- Dolor en las articulaciones
- Ictericia (coloración amarillenta de la piel y los ojos)
En las infecciones agudas, sus síntomas pueden comenzar entre 2 semanas y 6 meses después de haberse infectado. Si se trata de una infección crónica, es posible que no tenga síntomas hasta muchos años después.
¿Qué hacer para prevenir la hepatitis?
Para prevenir la hepatitis, hay que evitar estar en contacto con el agente causante, por ejemplo, no beber demasiado alcohol puede prevenir la hepatitis alcohólica. También la vacunación ayuda a prevenir la hepatitis A y B.
La hepatitis autoinmune no se puede prevenir, ya que su etiología es poco conocida en la actualidad.
La hepatitis tóxica derivada de intoxicación por ciertos venenos, productos químicos, medicamentos, etc., su prevención es el uso de equipos de protección individual (mascarillas, etc.).
¿Qué debe conocer el empresario sobre la vacunación de hepatitis A?
La Hepatitis A es una enfermedad vírica producida por un virus RNA de la familia de los Picornavirus, Los humanos son el único huésped natural y por tanto el único reservorio, aunque varios primates pueden ser infectados experimentalmente.
Son grupos de riesgo: los trabajadores desplazados a países con riesgo medio o alto de infección, homosexuales varones que tengan contactos sexuales múltiples, usuarios de drogas por vía parenteral, personas con trastornos de factores de la coagulación o enfermedades crónicas hepáticas y personas con riesgo ocupacional de infección (Ej: personal sanitario, de prisiones, guarderías y escuelas, trabajos con aguas residuales y los manipuladores de alimentos no por su trabajo, sino por lo que puedan contagiar ellos).
Previamente la empresa, por consejo de su servicio de prevención, debe adoptar las medidas higiénicas preventivas y de comportamiento de sus trabajadores expuestos a riesgos biológicos.
Recomendaciones:
- Prohibir que los trabajadores coman, beban o fumen en las zonas de trabajo que existan dichos riesgos.
- Proveer de ropa de protección apropiada o especial.
- Disponer de retretes o cuartos de aseos, que incluyan productos para la limpieza ocular y antisépticos para la piel.
- Disponer de lugar adecuado para almacenar los equipos de protección, verificar su limpieza y buen funcionamiento.
- Especificar los procedimientos de obtención, manipulación y procesamiento de muestras de origen humano o animal.
- Utilizar en todo momento los EPI´s, que le hayan recomendado.
EPIDEMIOLOGÍA Y ESTRATEGIA VACUNAL
El virus puede permanecer estable en el ambiente durante meses, dependiendo de las condiciones ambientales bajos niveles de Ph. y moderadas temperaturas, pero puede ser inactivado por altas temperaturas y formalinas.
Se contrae la enfermedad por vía fecal-oral, sea por contacto persona a persona o por ingestión de comida o agua contaminada. En muy raras ocasiones tempranas de la enfermedad por transfusión sanguínea.
La vacuna, que produce inmunidad de por vida, es de virus inactivados con formaldehido y adsorbidas en hidróxido de aluminio. Presenta buena tolerancia y la reacción adversa más descrita es una reacción local en el lugar de la inyección, pero es poco frecuente, aparece dolor local, eritema o inflamación en el 4-7% de los vacunados. Puede aparecer más infrecuentemente malestar general con febrícula y fatiga. Reacciones más severas no se han descrito. La pauta de vacunación consiste en dos dosis: la 1ª y una segunda dosis 6 a 12 meses después. La vía de administración es intramuscular en deltoides o subcutánea profunda en pacientes que manifiesten antecedentes hemorrágicos.
La infección por el virus de la hepatitis A, produce inmunidad para toda la vida, por lo que no produce ningún beneficio vacunar a personas con evidencia serológica de infección pasada.
La vacuna está contraindicada en:
- Antecedentes de una reacción de hipersensibilidad o neurológica en anteriores vacunaciones.
- En presencia de síndrome febril agudo.
- Enfermedades orgánicas graves, agudas o descompensadas.
La seguridad de la vacuna en el embarazo no ha sido establecida. Sin embargo, al ser una vacuna inactivada, el riesgo teórico para el feto es bajo. Debe contrastarse el riesgo asociado a la vacunación con el riesgo de contraer la enfermedad.